Gracias a la belleza de sus laberínticas calles y a su gran riqueza arquitectónica, Montoro fue catalogado en el año 1969 como Conjunto Histórico-Artístico.
Además, cuenta con el privilegio de albergar en su término municipal parte del Parque Natural de la Sierra de Cardeña y Montoro.
La iglesia de Santa María de la Mota se levantó en el siglo XIII y todavía conserva unos hermosos capiteles románicos.
Otros edificios de carácter religioso son: la parroquia de San Bartolomé, erigida en el siglo XV en estilo gótico-mudéjar; la parroquia de Nuestra Señora del Carmen, barroca del siglo XVIII; la iglesia de Santiago, también del siglo XVIII; la iglesia de San Juan de Letrán; la iglesia de Santa Ana; la iglesia de San Sebastián; y la ermita de la Virgen de la Gracia.
Entre los monumentos paganos destacan el puente sobre el río Guadalquivir, la Plaza de Toros y el Ayuntamiento, una casa ducal del siglo XVI.
Los trabajos de artesanía que se realizan en Montoro son los relacionados con el cuero, el hierro forjado, la piedra molinaza y la cerámica.
En Montoro se elaboran dulces como las tortas de manteca, los soplanos y los famosos mazapanes de La Logroñesa. Así mismo, es de calidad extraordinaria su miel de eucalipto.
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